Uno de los artistas más relevantes de su generación, en su país de origen y globalmente, el brasileño Cildo Meireles (Río de Janeiro, 1948) es autor de una vasta obra que se ha expresado en múltiples formatos y géneros, utilizando los materiales más diversos e inesperados. Emanando de las vanguardias de los años sesenta, Meireles inicia su obra en un entorno caracterizado por la presencia de artistas que, como Lygia Clark, Hélio Oiticica o Lygia Pape, llevan la abstracción geométrica y racionalista del neoconcretismo hacia la participación de los espectadores, iniciando una tradición de implicación social o terapia que rechaza la actitud pasiva del espectador. Los receptores del arte se convierten en usuarios y agentes activos, en verdaderos actores cuya presencia es condición para que la obra exista plenamente.
Meireles ha abordado algunas de las tensiones más importantes que definen la cultura occidental, especialmente el modernismo y sus crisis. Relacionando razonamiento, actividad mental y experiencia física, las oposiciones sensorial-intelectual, cuerpo-mente o contingente-necesario desaparecen al volverse simbióticas y generar nuevos sentidos a partir de la paradoja, la contradicción, los saltos de escala y la interrogación de las relaciones entre lo simbólico, lo imaginario, lo sagrado y la concreción del mundo real.
Hijo de un antropólogo que trabajó en el Servicio de Protección Indígena del Brasil, Cildo Meireles se inició muy pronto en el arte realizando su primera exposición personal en el Museo de Arte Moderno de Salvador de Bahía a los 19 años. Acompañando a su padre en numerosos viajes de investigación por todo el país, Meireles es un gran conocedor de la naturaleza y las diferentes comunidades indígenas que componen paisajes y poblaciones del país. La experiencia directa de los vastos paisajes, territorios y diversidad biológica y cultural combinada con la modernidad particular que cristaliza en América a partir del siglo XVI configuran el territorio desde el que emergen sus obras.
Con frecuencia, Meireles recurre a la contradicción y los contrasentidos. Sus instalaciones pueden desplegarse en enormes entornos inmersivos o pueden asimismo adoptar la dimensión minúscula de objetos casi imperceptibles. Los límites de lo visible y del razonamiento lineal occidental son cuestionados frecuentemente. Muchos de sus trabajos están destinados a sentidos corporales como lo son el oído, el tacto, el gusto o el olfato que han estado ausentes en una historia del arte dirigida casi exclusivamente a la vista.
La exposición que ALTTRA presenta en la ciudad de Palma, Mallorca, muestra, a través de cinco obras de diferentes períodos, algunos de los grandes temas que el artista ha cultivado: el azar y los instrumentos de cálculo, la percepción sonora como fuente de experiencia estética, la visualización de actividades mentales o los contrastes entre valor económico y valor de uso, entre espacio y objeto, entre percibir y pensar. La exposición se despliega en tres lugares emblemáticos del centro histórico de la ciudad para integrar el espacio público, su historia y sus vicisitudes.
La muestra ha sido concebida con el objetivo de contribuir a pensar el significado presente de la insularidad en un mundo globalizado y las características de nuestra condición contemporánea a través de potentes alegorías. La aparente contradicción de ser un territorio como las Islas Baleares rodeado y definido por el agua, pero que sufre carencias dramáticas de agua potable, motivó la elección de la obra Río Oír, 1976-2009 - 2011, un trabajo sonoro que nos transmite, entre otras cosas, cómo el sonido del fluir del agua puede transmitir la idea de que ésta tiene, como los humanos, emociones y afectos. Fio, 1990-1995, es un trabajo que analiza la distancia entre valor de uso y valor económico, explorando las fronteras físicas y los límites de los materiales, entre monumentalidad e invisibilidad. Utilizando más de 2.200 km de hilo de algodón, La Bruja, 1979-1981, ofrece, a través del espectáculo caótico del desorden y la suciedad, una posible caracterización de la actividad del pensamiento. Finalmente, Alto, 1977 - 2024, expresa la paradoja que produce la percepción simultánea del orden y el caos. Cuatro altavoces de diferentes tamaños emiten una voz peculiar que verbaliza todos los números de una regla de carpintero: el altavoz más grande emite el sonido más suave mientras que el altavoz más pequeño emite la más estridente. La voz que oímos pertenece a Iris Lettiere, quien fue la voz oficial que anunciaba las salidas y llegadas de vuelos en el aeropuerto Antônio Carlos Jobim de Río de Janeiro.
La obra puede visitarse hasta el 11 de enero de 2025 en el Col·legi d’Arquitectes de les Illes Balears, Estudi General Lul·lià y Espai Buit de lunes a sábado de 11:00 h a 15:00 h.
Cildo Meireles (Rio de Janeiro, 1948) es uno de los artistas más relevantes de su generación, tanto en Brasil como internacionalmente. A finales de los años 1960 inició su producción en el entorno del neo-concretismo brasileño, en el que se encontró con Lygia Clark, Hélio Oiticica y Lygia Pape entre otros artistas. En las décadas de los años 1970 y 1980, y bajo el gobierno militar que gobernó el país, la obra de Meireles adquirió un carácter más político y comprometido contra la dictadura sin abandonar nunca la absoluta condición poética de su arte.
En 1995, Meireles tuvo su primera exposición en un museo, el IVAM Centre Julio González de Valencia, donde consolidó su proyección internacional. En su dilatada carrera es frecuente encontrar su presencia en exposiciones y colecciones en instituciones de prestigio como el MoMA y el New Museum of Contemporary Art de Nueva York, la Documenta de Kassel, la Tate Modern de Londres, el MACBA en Barcelona o el MNCARS en Madrid. En 2008 recibió el Premio Velázquez de artes plásticas.
TERESA MARGOLLES (Culiacán, Sinaloa, 1963) estudió arte en la Dirección de Fomento a la Cultura Regional del Estado de Sinaloa (DIFOCUR), se diplomó en medicina forense en el Servicio Mexicano Forense y estudió Ciencias de la Comunicación en la Universidad Nacional Autónoma de México. Cabe destacar sus exposiciones individuales en el Museo de Arte Moderno de Bogotá y en la Kunsthalle Krems en Austria (2019), en el centro Witte de With de Rotterdam (2018) y en el Musée d’art contemporain de Montreal (2017), Museo Migros, Zurich (2014), LACMA, Los Ángeles y MUAC, Ciudad de México (2012), Museion, Bolzano, y Museo de Arte de Moderno Ciudad de México (2011) entre otros muchos. Ha participado en dos ediciones de la Bienal de Venecia (2019, 2009) y en otras bienales internacionales (Göteborg, 2003; Gwangju, 2004; Baltic Triennal, Vilnius, 2005; Liverpool, 2006) además de otras iniciativas colectivas de relevancia como ECO, MNCARS, Madrid (2005); Indelible Images (trafficking between Life and Death), Museum of Fine Arts, Houston (2005); Mexico City: An Exhibition about the Exchange Rates of Bodies and Values, MoMA-P.S.1, Nueva York (2002). Teresa Margolles recibió el Premio Prins Claus (Países Bajos) en 2012.
One of the most relevant artists of his generation, in his country of origin and globally, Brazilian Cildo Meireles (Rio de Janeiro, 1948) is the author of a vast body of work that has been expressed in multiple formats and genres, using the most diverse and unexpected materials. Emanating from the avant-garde of the 1960s, Meireles began his work in an environment characterized by the presence of artists such as Lygia Clark, Hélio Oiticica and Lygia Pape, who took the geometric and rationalist abstraction of neo-concretism towards the participation of the spectators, initiating a tradition of social involvement or therapy that rejects the passive attitude of the public. The audiences of art become users and active agents, true actors whose presence is a condition for the work of art to fully exist.
Meireles has addressed some of the most important tensions that define Western culture, especially modernism and its crises. Relating reasoning, mental activity and physical experience, the oppositions sensorial-intellectual, body-mind or contingent-necessary disappear as they become symbiotic and generate new meanings from paradox, contradiction, leaps of scale and the interrogation of the relationships between the symbolic, the imaginary, the sacred and the concreteness of the real world.
The son of an anthropologist who worked for Brazil's Indigenous Protection Service, Cildo Meireles began working in art at an early age, holding his first solo exhibition at the Museum of Modern Art in Salvador de Bahia at the age of 19. Accompanying his father on numerous research trips throughout the country, Meireles became very knowledgeable about nature and landscapes, as well as the different indigenous communities that make up Brazil's populations. Having grown up in Brasilia during the construction of the new Capital, the direct experience of the vast territories and their biological and cultural diversity combined with the particular modernity that crystallizes in America make up the territory from which his works emerge.
Meireles often resorts to contradiction and discrepancies. His installations can unfold in huge immersive environments or they can also adopt the minuscule dimension of almost imperceptible objects. The limits of the visible and of Western linear thinking are frequently interrogated. Many of his works are aimed at senses such as hearing, touch, taste or smell that have been absent in a history of art directed almost exclusively to sight.
The exhibition that ALTTRA presents in the city of Palma, Mallorca, shows, through four works from different periods, some of the major themes that the artist has cultivated: chance and instruments of calculation, sound perception as a source of aesthetic experience, the power of metaphors, the visualization of mental activities or the contrasts between economic value and use value, between space and object, between perceiving and thinking. The exhibition is displayed in three emblematic places in the historic center of the city to integrate the public space, its history and its vicissitudes.
The exhibition has been conceived with the aim of contributing to think the present meaning of insularity in a globalized world, as well as the characteristics of our contemporary condition through powerful allegories. The apparent contradiction of being a territory, like the Balearic Islands, surrounded and defined by water but suffering dramatic shortages of drinking water, motivated the choice of the work Río Oír, 1976-2009 - 2011, a sound work that conveys, among other things, how the flow of water can communicate the idea that water has, like humans, emotions and affections. Fio, 1990-1995, is a work that analyzes the distance between use value and economic value, exploring the physical boundaries and limits of materials, between monumentality and invisibility. Using more than 2,200 km of cotton thread, La Bruja 1979-1981, offers, through the chaotic spectacle of disorder and dirt, a possible characterization of the activity of thought. Finally, Alto, 1977 – 2024, communicates the contrast produced by the simultaneous perception of order and chaos. Four speakers of different sizes emit a peculiar voice that verbalizes all the numbers of a carpenter's rule: the largest speaker emits the softest sound while the smallest speaker emits the most strident. The voice we hear belongs to Iris Lettiere, who announced the departures and arrivals of flights at Antônio Carlos Jobim airport in Rio de Janeiro.
The exhibition can be visited until January 11, 2025, at the Col·legi d’Arquitectes de les Illes Balears, Estudi General Lul·lià, and Espai Buit, from Monday to Saturday, 11:00 AM to 3:00 PM.
Cildo Meireles (Rio de Janeiro, 1948) is one of the most important artists of his generation, both in Brazil and internationally. In the late 1960s, he began his work within the Brazilian Neo-Concretism movement, where he encountered artists such as Lygia Clark, Hélio Oiticica, and Lygia Pape, among others. During the 1970s and 1980s, under the military dictatorship that ruled Brazil, Meireles' work took on a more political and committed character, opposing the regime, while never abandoning the poetic nature of his art.
In 1995, Meireles held his first exhibition at a museum, at the IVAM Centre Julio González in Valencia, where he consolidated his international recognition. Throughout his extensive career, his presence can frequently be found in prestigious exhibitions and collections at institutions such as the MoMA and the New Museum of Contemporary Art in New York, Documenta in Kassel, Tate Modern in London, MACBA in Barcelona, and the MNCARS in Madrid. In 2008, he was awarded the Velázquez Prize for Visual Arts.
TERESA MARGOLLES (Culiacán, Sinaloa, 1963) estudió arte en la Dirección de Fomento a la Cultura Regional del Estado de Sinaloa (DIFOCUR), se diplomó en medicina forense en el Servicio Mexicano Forense y estudió Ciencias de la Comunicación en la Universidad Nacional Autónoma de México. Cabe destacar sus exposiciones individuales en el Museo de Arte Moderno de Bogotá y en la Kunsthalle Krems en Austria (2019), en el centro Witte de With de Rotterdam (2018) y en el Musée d’art contemporain de Montreal (2017), Museo Migros, Zurich (2014), LACMA, Los Ángeles y MUAC, Ciudad de México (2012), Museion, Bolzano, y Museo de Arte de Moderno Ciudad de México (2011) entre otros muchos. Ha participado en dos ediciones de la Bienal de Venecia (2019, 2009) y en otras bienales internacionales (Göteborg, 2003; Gwangju, 2004; Baltic Triennal, Vilnius, 2005; Liverpool, 2006) además de otras iniciativas colectivas de relevancia como ECO, MNCARS, Madrid (2005); Indelible Images (trafficking between Life and Death), Museum of Fine Arts, Houston (2005); Mexico City: An Exhibition about the Exchange Rates of Bodies and Values, MoMA-P.S.1, Nueva York (2002). Teresa Margolles recibió el Premio Prins Claus (Países Bajos) en 2012.
Un dels artistes més rellevants de la seva generació, al seu país d'origen i globalment, el brasiler Cildo Meireles (Rio de Janeiro, 1948) és autor d'una vasta obra que s'ha expressat en múltiples formats i gèneres, usant els materials més diversos i inesperats. Emanat de les avantguardes dels anys seixanta, Meireles inicia la seva obra en un entorn caracteritzat per la presència d'artistes que, com Lygia Clark, Hélio Oiticica o Lygia Pape, porten l'abstracció geomètrica i racionalista del neoconcretisme cap a la participació dels espectadors, iniciant una tradició d’implicació social o teràpia que rebutja l’actitud passiva del públic. Els receptors de l'art es converteixen en usuaris i agents actius, en veritables actors la presència dels quals és condició perquè l'obra d'art existeixi plenament.
Meireles ha abordat algunes de les tensions més importants que defineixen la cultura occidental, especialment el modernisme i les seves crisis. Relacionant raonament, activitat mental i experiència física, les oposicions sensorial-intel·lectual, cos-ment o contingent-necessari desapareixen en tornar-se simbiòtiques i generar nous sentits a partir de la paradoxa, la contradicció, els salts d'escala i la interrogació de les relacions entre allò simbòlic, allò imaginari, allò sagrat i la concreció del món real.
Fill d'un antropòleg que va treballar al Servei de Protecció Indígena del Brasil, Cildo Meireles es va iniciar molt aviat a l'art realitzant la seva primera exposició personal al Museu d'Art Modern de Salvador de Bahia als 19 anys. Acompanyant el seu pare en nombrosos viatges de recerca per tot el país, Meireles es va fer gran coneixedor de la natura i els paisatges, així com les diferents comunitats indígenes que composen les poblacions del Brasil. L'experiència directa dels vastos territoris i la seva diversitat biològica i cultural combinada amb la modernitat particular que cristal·litza a Amèrica a partir del segle XVI configuren el territori des del qual emergeixen les obres.
Amb freqüència, Meireles recorre a la contradicció i els contrasentits. Les seves instal·lacions es poden desplegar en grans entorns immersius o també poden adoptar la dimensió minúscula d'objectes gairebé imperceptibles. Els límits del visible i del raonament lineal occidental són sovint interrogats. Molts dels seus treballs estan destinats a sentits com l'oïda, el tacte, el gust o l'olfacte que han estat absents en una història de l'art adreçada gairebé exclusivament a la vista.
L'exposició que ALTTRA presenta a la ciutat de Palma, a Mallorca, mostra, a través de quatre obres de diferents períodes, alguns dels grans temes que l'artista ha cultivat: l'atzar i els instruments de càlcul, la percepció sonora com a font d'experiència estètica, el poder de les metàfores, la visualització d’activitats mentals o els contrastos entre valor econòmic i valor d’ús, entre espai i objecte, entre percebre i pensar. L'exposició es desplega en tres llocs emblemàtics del centre històric de la ciutat per integrar-hi l'espai públic, la seva història i les seves vicissituds.
La mostra ha estat concebuda amb l'objectiu de contribuir a pensar el significat present de la insularitat en un món globalitzat, així com les característiques de la nostra condició contemporània a través de potents al·legories. L'aparent contradicció de ser un territori com les Illes Balears, envoltat i definit per l'aigua, però que pateix mancances dramàtiques d'aigua potable, va motivar l'elecció de l'obra Río Oír, 1976-2009 – 2011, un treball sonor que ens transmet, entre altres coses, com el fluir de l’aigua pot comunicar la idea que aquesta té, com els humans, emocions i afectes. Fio, 1990-1995, és un treball que analitza la distància entre valor d'ús i valor econòmic, explorant les fronteres físiques i els límits dels materials, entre monumentalitat i invisibilitat. Utilitzant més de 2.200 km de fil de cotó, La Bruja, 1979-1981, ofereix, mitjançant l'espectacle caòtic del desordre i la brutícia, una possible caracterització de l'activitat del pensament. Finalment, Alto, 1977-2024, comunica el contrast que produeix la percepció simultània de l'ordre i el caos. Quatre altaveus de diferents mides emeten una veu peculiar que verbalitza tots els números d'una regla de fuster: l'altaveu més gran emet el so més suau mentre l'altaveu més petit emet la més estrident. La veu que sentim pertany a Iris Lettiere, que anunciava les sortides i arribades de vols a l'aeroport Antônio Carlos Jobim de Rio de Janeiro.
L’obra es pot visitar fins al 11 de gener de 2025 en el Col·legi d’Arquitectes de les Illes Balears, Estudi General Lul·lià i Espai Buit de dilluns a dissabte d’11:00 h a 15:00 h.
Cildo Meireles és un dels artistes més rellevants de la seva generació, tant al Brasil com internacionalment. A finals dels anys 1960 començà la seva producció al voltant del neo-concretisme brasiler, en el qual es va trobar amb Lygia Clark, Hélio Oiticica i Lygia Pape entre altres artistes. En les dècades dels anys 1970 i 1980, i sota el govern militar que governà el país, l’obra de Meireles adquirí un caràcter més polític i compromès contra la dictadura sense abandonar mai l’absoluta condició poètica del seu art.
El 1995, Meireles va tenir la seva primera exposició en un museu, l’IVAM Centre Julio González de València, on es va consolidar la seva projecció internacional. En la seva dilatada carrera és freqüent trobar la seva presència en exposicions i col·leccions en institucions de prestigi com el MoMA i el New Museum of Contemporary Art de Nova York, la Documenta de Kassel, la Tate Modern de Londres, el MACBA a Barcelona o el MNCARS a Madrid. El 2008 va rebre el Premi Velázquez d’arts plàstiques.
TERESA MARGOLLES (Culiacán, Sinaloa, 1963) estudió arte en la Dirección de Fomento a la Cultura Regional del Estado de Sinaloa (DIFOCUR), se diplomó en medicina forense en el Servicio Mexicano Forense y estudió Ciencias de la Comunicación en la Universidad Nacional Autónoma de México. Cabe destacar sus exposiciones individuales en el Museo de Arte Moderno de Bogotá y en la Kunsthalle Krems en Austria (2019), en el centro Witte de With de Rotterdam (2018) y en el Musée d’art contemporain de Montreal (2017), Museo Migros, Zurich (2014), LACMA, Los Ángeles y MUAC, Ciudad de México (2012), Museion, Bolzano, y Museo de Arte de Moderno Ciudad de México (2011) entre otros muchos. Ha participado en dos ediciones de la Bienal de Venecia (2019, 2009) y en otras bienales internacionales (Göteborg, 2003; Gwangju, 2004; Baltic Triennal, Vilnius, 2005; Liverpool, 2006) además de otras iniciativas colectivas de relevancia como ECO, MNCARS, Madrid (2005); Indelible Images (trafficking between Life and Death), Museum of Fine Arts, Houston (2005); Mexico City: An Exhibition about the Exchange Rates of Bodies and Values, MoMA-P.S.1, Nueva York (2002). Teresa Margolles recibió el Premio Prins Claus (Países Bajos) en 2012.